REFLEXIONES EN EL COCHE

Resulta que va uno circulando con su coche, miércoles 29 de noviembre, buscando la subida del antiguo Hospital Militar dirección Vial Norte, para llegar a su destino, zona Huerta de la Reina.Te encuentras con un dilema: o tiras por el Vial, o por Santa Rosa. Eliges lo primero, pues es temprano, 17:30 horas, y no habrá mucho tráfico por el Vial. Ja Ja Ja. Conforme avanzo en la inmensa avenida, 4 carriles, eahh¡¡ Jesús, te volviste a equivocar. Vaya parón. Bueno cojo el carril de la derecha. Algo más rápido, pero me paro en el semáforo de la confluencia Vial-El Brillante. Con dificultad, llego hasta la confluencia con Avda. Gran Capitán.Veo el por qué del parón, hay sirenas, una patrulla de la policía local, ha habido un golpe entre dos coches, y como no, el morbo, esa inteligencia mediocre, ínfima, nos brota, haciendo que desaceleremos, y provoquemos el parón. Es que somos chismosos por naturaleza. En cuanto vemos una sirena encendida... buff¡¡ nos hierve la adrenalina, y te preguntas ¿qué ha pasado? ¿qué ha pasado? y claro te tienes que parar y joder a los demás. Sí, porque ésto es algo innato, desde chiquititos se lo vemos hacer a nuestros padres, hermanos mayores, tíos, etc. y tú, que no eres menos, tienes que hacer lo mismo, desacelerar, y crear el follón.
Sigo avanzando, he cruzado el semáforo, y cuál es mi sorpresa, que a la altura del choque, en todo el Paseo de Córdoba, también coloquialmente llamado paseo marítimo (explíqueme alguien quién fue el lúcido que lo llamó así y por qué, no me entero todavía), casi paralelo al hotel nuevo el Center, hay una cola que casi perfectamente hasta el otro Hotel, el AC. ¿Y esa cola de gente? al principio una carpa blanca, y camiones de la Covap, ya estáaaa¡¡¡, y aquí el tema importante del artículo: NOS ESTÁN REGALANDO ALGO. Efectivamente es el día de la DEGUSTACIÓN DE PASTEL CORDOBÉS. Óle, toma ya. Nos encontramos "media Córdoba" esperando un trozo de un pastel que por lo visto va al Record Guiness, y un vasito de batido. Que buenos somos, como apoyamos lo nuestro, como nos desvivimos en probar un trozo de nuestro pastel, con el frío que está cayendo...
El día después es apoteósico. Los periódicos, radio, televisión se hacen eco de lo allí acontecido, y nos transmiten el nuevo éxito que el acto conllevó. Los personajes públicos más actuales, orgullosos de su pastel, y de su foto. Y la gente de a pie, más contenta todavía, un año más pastel gratis. Y yo en mi coche, y tras escuchar la noticia por radio, reflexiono:
"Si en lugar de ser gratis la degustación, la ponen al precio módico de 2 euros, y con todo el dinero recaudado se realiza una obra de caridad, por ejemplo en los Hermanos de la Cruz Blanca, tan necesitada; en el Hospital de Ancianos de los Dolores; en un montón de sitios que subsisten muchas veces a duras penas.O simplemente, para realizar obras de suma importancia para la ciudad... ¿Cuánta cola me hubiera encontrado? ¿sería aún mayor? ".
El carácter del cordobés me hace pensar que no,y me duele. Irían como en el fútbol, los de siempre. Somos así, pero me hiere. Y todos lo sabemos, pero seguimos encubriendo una realidad que pese a que nos pese, la tenemos encima nuestra, y tenemos que cambiarla. También sé que es utópico pensar en cambiar, pero como eso va en la persona, cada uno es cada uno. Quizás esto se siente, te hiere, se reflexiona porque has vivido fuera unos años, en ciudades muy distintas, y has notado diferencias con tu ciudad. Quizás. Pero aquí cuento nuestra realidad.
Y !!ojo¡¡, sé que esa actividad ocio-social-gastronómica de degustación, es desde sus principios gratis, y lo seguirá siendo, de lo cual estoy muy deacuerdo y lo respeto, pero mi reflexión ahí quedó.
Degustación del IX Pastel Cordobés ( Diario Córdoba - 29/11/2006 )
Más de 14.000 personas degustan el V Pastel Cordobés ( Diario Córdoba - 21/11/2002 )