lunes, 31 de marzo de 2008

FOTOS PARA EL RECUERDO...

Amaneció el Domingo de Ramos. Este año las previsiones auguraban una tregua entre la Semana Grande y el Cielo con su lluvia.



Como no podía ser de otra manera, fuí en busca de lo que tenía que aprovechar, pues cualquier cambio provocaría de nuevo un fiasco duro de asimilar. El Señor en su Entrada Triunfal desprendía ese calor de marzo, apetecible por un lado y ansiado por el mismo.


Ha sido una Semana en la que el Miércoles Santo quiso poner su nota discordante y triste, y para algunas hermandades, Pasión y Perdón, se están volviendo desgraciadamente en habituales. Ninguna en este día realizó su estación de penitencia. Ese día he de reconocer que tenía un pellizco en el corazón observando el llanto desconsolado de aquellos hermanos cofrades, que llevaban 4 años intentando realizar con absoluta normalidad su estación de penitencia. No pudo ser. Deseo desde aquí, que el año que viene sea su año, el de todos.

Y el Lunes Santo, este cordobés cuentahistorias realizó su estación de penitencia debajo de Ntro. Padre Jesús de la Redención. Como en años anteriores, hasta última hora, no supimos con certeza la previsión meteorológica. Al final disfrutamos, paseamos al Señor de la Hué, y lo recogimos con su Madre, Ntra. Señora de la Estrella que esperaba ansiosa su llegada en la Parroquia de San Fernando.

Perdonad por no poder realizar más fotos que del Domingo de Ramos, pero el acarreo que conllevaba el equipo fotográfico y tras una tendinitis que afecta a mi hombro, preferí, plasmar tan sólo un día. Perdonad por la ausencia de reportaje. Espero que lo comprendáis.

Por último, quisiera con estas fotografías dar mi más sentido homenaje a la Confitería, panadería "La Purísima", centro neurálgico de exultantes y ricas torrijas ; lugar de obligado cafelito con su torta de azúcar; recinto de multitud de tertulias meriendísticas; lugar de profunda tradición pastelera, que en un futuro muy cercano pondrá fin a sus raíces cordobesas, dejando huérfana de fragancia hornera la entrada a la emblemática plaza del Cristo de los Faroles.



Con ella se irán cientos, miles, millones de recuerdos, que cada cordobés que hayamos disfrutado de ella, debemos mantener presente en nuestro pensamiento. Por ello, os regalo estas fotografías de esa fachada enladrillada burdeos, que morirá sin que nadie pueda remediarlo. Enemigo Don Dinero. Córdoba, también sufrirá tu ausencia. Para siempre, Confietería...."La Purísima". Mi humilde homenaje.

No hay comentarios: